La raíz de nuestros males en torno al trabajo y nuestra profesión; “Debes trabajar muy duro”
¿Sabías que? La palabra trabajar viene de del latín tripalium, que significaba literalmente ‘tres palos’ y era un instrumento de tortura formado por tres estacas a las que se amarraba al reo (fuente, RAE).
Tenemos culturalmente arraigado que trabajar, es una tortura, un esfuerzo, un hacer hasta dejar la piel. Y al ser cultural, incluso ancestral, rige nuestras creencias, conductas y emociones.
Entonces, ¿Cómo podemos disfrutar y ser felices a la hora de trabajar, si tenemos en nuestra memoria colectiva que trabajar o dedicarnos a nuestra profesión, debe ser una actividad hecha con mucho esfuerzo, incluso dolor?
Aquí te dejo 3 pasos que te ayudarán:
1.- Pon atención a lo que piensas, a tus creencias sobre trabajar o sobre el trabajo que haces:
¿Piensas que trabajar implica una obligación tortuosa o de gran esfuerzo que te impide disfrutarlo? ¿Piensas que, para ganar bien, debes trabajar muchas horas al día y dedicarte a lo que no te gusta?
Créeme que, si la respuesta es Sí, no podrás tener un trabajo que te apasione, en el que brilles y ganes bien. Y con ganar bien, me refiero a lo económico, tiempo para ti, calidad de vida.
Porque nuestras creencias, como ya lo he hablado en otros artículos del blog, actúan como condicionamientos que guían sin darnos cuenta, nuestras acciones y los resultados que logramos.
2.- Conoce tu marca personal y aporte de valor
¿Sabes…?
- En qué te destacas como profesional.
- Qué ven los demás de ti, que les lleva a relacionarse contigo y verte como un aporte para ellos.
- Qué ven en ti, que les aleja y no les ayuda a verte como una solución en lo laboral e incluso personal.
- En qué te diferencias de tus colegas y otras personas con las que te relacionas y que representa una oportunidad para ti y los demás.
- Qué podrías mejorar en tus habilidades y conocimientos para ser un mejor o mayor aporte.
- Qué haces tan bien y qué te da tanto placer, que podrías hacerlo incluso sin que te pagaran.
3.- Dedícate a buscar y tener un trabajo que te haga sentido:
Un trabajo en que hagas lo que te gusta hacer (vocación), haces muy bien (talento) y está en la línea de aportar valor, incluso si te interesa, transcender o generar impacto positivo en otras personas (empresa, jefatura, colegas, clientes, etc.).
Todo trabajo por el sólo hecho de existir, está al servicio de los demás y eso es impacto positivo. Pero a muchas personas se les olvida o no ven el impacto positivo que generan.
Por ejemplo, la o el líder de un equipo genera un impacto directo en las personas con las que trabaja. Puede generar impacto positivo, si los forma, capacita, desarrolla, incluso inspira y da la oportunidad de crecimiento. Esa es una forma de contribuir y trascender.
Bueno, ahora que ya sabes esto, también sabes que puedes cambiar tu forma de ver el trabajo y si quieres cambiarlo, puedes pedir ayuda profesional para reestructurar tus creencias, trabajar tu marca personal y aporte, y avanzar más rápido.
Un abrazo,
Paola Mora M
Psicóloga & Coach