Esta semana perdí una persona muy querida, le diagnosticaron cáncer en diciembre y aunque se sometió a un tratamiento invasivo que tenía la finalidad de sanarlo o al menos retardar su avance, finalmente falleció después de casi cinco meses. Así fue como para mí, la fragilidad tocó mi puerta y me conectó con la tristeza.
Perder a un primo querido cuya risa, alegría y lindas conversaciones e historias familiares ha sido lo que me ha tenido recordando en estos días, los últimos momentos de haber disfrutado de su compañía. Y ha sido esto, lo que me ha hecho a la vez, sentirme honrada y agradecida con la vida.
La muerte de una persona a la que a amamos; la pérdida de un trabajo que valoramos; una enfermedad grave que nos pilla de sorpresa; todos momentos que nos conectan con la fragilidad y la sensación de que hemos estado centrados en cosas no importantes y hemos estado perdiendo el tiempo dejando de valorar y disfrutar, cuándo ese era el momento para hacerlo y para agradecer.
Son estas ocasiones en que la fragilidad toca nuestra puerta, las que llegan como un llamado de atención para despertarnos, para conmovernos y darnos la oportunidad de aprender y mantenernos conectados a la vida.
A nivel profesional, en nuestros trabajos, en nuestros emprendimientos, cuántas veces nos dormimos y quedamos anclados en todo lo que no es acorde a nuestras expectativas. Y no miramos todo lo que sí hemos logrado, todo ese capital intelectual, emocional y social que hemos sumado a lo largo de los años y que se transforma en una gran oportunidad para nosotros de ser “exitosos” y felices.
Estar anclado a la queja, no sólo nos desconecta de disfrutar y de sentirnos felices, sino que nos resta el poder que tenemos en nosotros para lograr de lo más simple a lo más desafiante de nuestros objetivos.
Entonces no esperemos a que sea la fragilidad la que toque nuestra puerta y nos despierte para movilizarnos, conectar con la vida y cambiar de rumbo. No es que sea erróneo, es que quizás podría ser menos intenso y menos doloroso de esta forma.
Si te hace sentido y quieres hacer alguna movida en tu carrera o en tu vida profesional, recuerda que contar con ayuda, lo hace más fácil, rápido y sentir la humanidad de ser parte de algo más grande.
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Te dejo un gran abrazo,
Paola Mora M
Psicóloga & Coach